El tiempo que llevamos lidiando con la pandemia sin duda ha afectado el sueño de millones de personas que experimentan mayor ansiedad, estrés e insomnio. Un 51% de habitantes de la Región Metropolitana dijo que su calidad de sueño ha empeorado en este tiempo, según Corpa Estudios de Mercado.
Las expectativas están en que el proceso de vacunación otorgue mayor paz a la población y permita que millones de personas puedan caer rendidas ante los brazos de Morfeo.
No es antojadizo. El acto de dormir es crucial para que el ser humano haga todas las funciones que le esperan durante la vigilia. Estudiar, trabajar o manejar, por nombrar algunas.
Seguramente habrás leído de importantes empresarios o políticos que dormían menos de 6 horas, sin embargo, la recomendación de la OMS es que los adultos duerman entre 7 y 8 horas. Para los niños y adolescentes la cantidad de horas es aún mayor.
No existe una fórmula mágica para dormir bien, pero sí hay ciertos hábitos que seguramente puedes cambiar y que te servirán para tener un mejor descanso.
1. Evita ingerir cafeína durante la tarde.
2. Haz ejercicio, pero no tan cerca de la hora en que irás a dormir.
3. Tener una pieza suficientemente oscura y ventilada.
4. Hacer una actividad de relajo como leer, darse una ducha caliente, conversar o escuchar música.
5. Evitar el uso de pantallas como la TV o celular una hora antes de dormir.
6. No fumar ni beber alcohol. Este último afecta al sueño REM, que es el que hace que el sueño sea reparador y de calidad.
7. Cena liviano.
Es importante que evalúes si te sientes descansado cuando te levantas de la cama. Algunos indicios que aparecen a raíz de la privación del sueño son: cambios en el estado de ánimo, irritabilidad, depresión, ansiedad, problemas para relacionarse (más en niños y adolescentes). También puedes manifestarse en apneas del sueño, que significa que tu cuerpo interrumpe el proceso de respiración, lo que te hará despertar más cansado en la mañana.
El riesgo físico de no dormir bien provoca presión arterial alta, enfermedades cardiovasculares, obesidad o diabetes tipo 2.
En resumen, dormir correctamente es tan importante como llevar una dieta sana y hacer ejercicio. Esperamos que estos consejos te sirvan para mejorar tu calidad de vida.