En el imaginario colectivo, las bebidas están al centro de la mesa en las comidas familiares. Y en Chile lo es aún más, lo que nos lleva a un triste podio entre los países de mayor consumo de bebidas azucaradas del mundo, ocupando el tercer lugar con 79,1 litros per cápita al año (334 botellas individuales de 237 cc), siendo superado solo por México (115,4 litros) y Estados Unidos (103,3 lts).
Una investigación de la Universidad McMaster (Canadá) y Hamilton Health Sciences, descubrieron que una dieta alta en carbohidratos de mala calidad -como las bebidas- aumenta en un 50% la probabilidad de sufrir complicaciones cardiovasculares y morir súbitamente. Para realizar el estudio, cuyos resultados se publicaron en la prestigiosa revista The New England of Medicine, los científicos monitorearon a 137.851 personas entre 35 y 75 años de todo el mundo. Las conclusiones llegan tras 10 años de seguimiento y se trata del trabajo más grande realizado a la fecha sobre este tema, según dijeron los autores.
La explicación viene en que hay mayor nivel de azúcar en sangre, lo que trae resistencia a la insulina, y a su vez provoca mayor riesgo de aterosclerosis (obstrucción de las arterias), que lleva a tener enfermedades cardiovasculares.
¿De qué alimentos estamos hablando? De los cereales azucarados, jugos de frutas con azúcar y repostería procesada tienen en común un perfil nutricional pobre, ya que no aportan vitaminas ni fibra. También se incluyen los carbohidratos con alto índice glicémico. En este grupo están el arroz y pan blanco, los fideos y las papas. Para considerarse de buena calidad deben tener alto contenido de fibra (como el arroz, pastas y pan en versión integral).
Estamos entrando en meses más fríos y el encierro invita a comer más alimentos de alto contenido calórico. Procuremos buscar opciones más nutritivas, legumbres, granos enteros. Hay que dejar de lado los berlines para cuidar nuestro corazón hoy, pero sobre todo nuestra salud a largo plazo.
Fuente: El Mercurio, Vida, Ciencia y Tecnología. Febrero 2021.