La hipertensión arterial es la presión arterial elevada en las arterias que suministran sangre al cuerpo. Cuanto mayor sea la presión, más probable será que la persona desarrolle complicaciones graves, como infarto de miocardio, insuficiencia cardíaca, accidente cerebrovascular y enfermedad renal. La hipertensión arterial también se conoce como hipertensión «esencial» o «idiopática» porque no hay una causa secundaria aparente. Suele detectarse en las revisiones médicas rutinarias y la mayoría de las personas que la padecen tienen más de 45 años. Las causas exactas de la hipertensión arterial no se conocen del todo, pero sabemos que los factores relacionados con el estilo de vida desempeñan un papel importante en su desarrollo. El riesgo de desarrollar hipertensión arterial puede reducirse mejorando los hábitos de alimentación y ejercicio.
¿Cuáles son los síntomas de la hipertensión arterial?
Los síntomas de la hipertensión arterial suelen ser vagos, y muchas personas ni siquiera son conscientes de ellos. El riesgo de complicaciones aumenta con niveles de presión arterial más altos. Los síntomas de la hipertensión arterial son:
- Dolores de cabeza: es un síntoma común de la presión arterial alta, pero no es específico de la hipertensión. También es un síntoma común de las migrañas y es más probable que ocurra en pacientes con presión arterial alta que también tienen migrañas.
- Mareos o aturdimiento: lo experimentan entre el 30 y el 40% de las personas con hipertensión. Suele estar causado por un descenso de la tensión arterial al pasar de una posición sentada a otra de pie. Suele desaparecer rápidamente y no indica ninguna complicación grave.
- Pérdida de memoria a corto plazo: suele ocurrir con la hipertensión, pero el paciente no suele notarlo. Puede ser detectada por familiares o amigos.
- Apnea del sueño. Es la interrupción de la respiración durante el sueño. Suele producirse en personas con hipertensión arterial y puede causar complicaciones graves.
¿Cómo se diagnostica la hipertensión arterial?
La presión arterial se mide en la mayoría de los centros sanitarios. La lectura de la presión arterial se expresa en dos números: una presión arterial sistólica (la presión máxima en las arterias cuando el corazón se contrae) y una presión arterial diastólica (la presión mínima en las arterias cuando el corazón se relaja entre latidos). La presión arterial se expresa como un porcentaje de la presión arterial normal para ese individuo. La presión arterial se mide en el brazo con un esfigmomanómetro, un dispositivo que infla un manguito alrededor de la parte superior del brazo y muestra la presión arterial sistólica y diastólica. La presión arterial se mide en el brazo utilizando un esfigmomanómetro, un dispositivo que infla un manguito alrededor de la parte superior del brazo y muestra la presión arterial sistólica y diastólica.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento para la hipertensión arterial?
La adopción de hábitos saludables puede reducir el riesgo de desarrollar hipertensión arterial. La mejor manera de evitar complicaciones es someterse a controles periódicos de la tensión arterial y tomar medicamentos si se diagnostica hipertensión.
Conclusión
La hipertensión arterial es un importante problema de salud pública en todo el mundo. Se calcula que las tasas de hipertensión en adultos mayores de 20 años son de alrededor del 30%, y de hasta el 50% en los ancianos. Cuanto más altos son los niveles de presión arterial, mayor es el riesgo de complicaciones y muerte prematura por enfermedades cardiovasculares. La presión arterial puede reducirse mediante cambios en el estilo de vida, como llevar una dieta sana, hacer actividad física y no fumar. Si los cambios en el estilo de vida no son suficientes para controlar la presión arterial, existen medicamentos para tratar la hipertensión.